Durante estos días he estado callado porque necesitaba un poco de mutismo, no dar tantas vueltas superfluas, recapacitar y quedar conmigo mismo. A veces eso es lo mejor.
Continúo creyendo que la mejor elección sería dejarlo todo atrás, construir una granja en cualquier montaña perdida de dios y olvidar el mundo.
Sospecho que todo esto son periodos, ciclos, donde constantemente hay fases en las que optamos por unas cosas y etapas en las que nos inclinamos por otras. Al final todo te lleva a ir por la vía que te puede brindar más bienestar, y no digo emociones, mucho menos riesgos o aventuras, pero sí armonía o al menos la impresión de sentir que uno hace lo correcto.
Eso igualmente es bonito, eso también te puede proporcionar más de lo que tú esperabas.
