martes, 22 de noviembre de 2011

Me siento lesbiano.

Supongo que yo, al igual que otros muchos hombres también ando buscando la igualdad, pero solo por mis adentros (para que no se note por fuera). Tus mismos gestos, tú misma sensibilidad. El cruzar de piernas tal y como tú lo haces, o lloriquear tus mismas canciones simplonas. Mis instantes Bridget Jones, mi blog secreto. Mi pintalabios de cacao para los labios, mis neuras y mis suspiros.

Que subas a mi coche y conversemos de tú a tú sin ser yo gay ni tú lesbiana. Follar y después de tu cigarro, si fumas, jugar los dos a colorearnos la cara o vestirnos tú de mí y yo de tú con dos cojones. Soñar de 11 a 8 con mi cabeza apoyada en tu pecho para sentirme mimado y de las 8 en adelante en posición viceversa. Cuidarnos en turnos. Combatir tú con el banco mientras yo espero en casa limpiándole el polvo a tus discos de Springsteen. Darle la vuelta a todo sin confundir nuestra disposición genital.

¿Por qué los hombres no podemos ser sensibles sin perder nuestra compostura?

¿Por qué los hombres, siempre, me hablan de mujeres que no son las suyas?

¿Por qué las mujeres, casi siempre, me hablan del tiempo?

Indefectiblemente en ambos casos, me siento lesbiano.

3 comentarios:

  1. porque et toca viure en una sociedad en los rols estan alterrats ,on ja lo que vas apendre del teu entorn no es real i on ningu ni natros les dones sabem cuan com i perque actuem el feminismo exacerbat mos ha portat aixo ningu ja exactament sap cuan el seu comportament es "normal" ni coneixem los limits ni los podem inculcar a les noves generacions anirem provant i ja espero que algun dia es trovara un equilibri !!

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  2. Has deixat d'escriure? o és que el 2012 no t'agrada? ... ho fas bé, força bé, és una pena!

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  3. Gracias por este regalo. Perdon por no hacerte caso por demasiado guapo.
    Mi estado es el mismo: ninguno. O vivir suspendida, escondiendo mi lado salvaje, para que me quede algo realmente mio.
    Bienvenido

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