martes, 19 de octubre de 2010

En el fondo de un cajón

Este último viaje a Andalucía me ha traído recuerdos de mi infancia, concretamente de los viajes en verano al pueblo.

Recuerdo un llavero repleto de llaves y a mi padre buscando una llave en el. Mientras mi madre le decía que seguramente estaría en otro llavero y él como no podía ser de otra manera decía que no, que estaba en ese llavero, el llavero de toda la vida y que tarde o temprano daría con ella.

Fue probando una tras otra hasta que la encontró y abrió la puerta. Lo recuerdo nítidamente, lo primero que sentí fue el olor a cerrado una mezcla de añejo, rancio, antiguo y polvo. No recuerdo que hora sería, sobre el medio día, al final de la mañana, recuerdo que la luz entraba a raudales por las ventanas entre abiertas pese a que acumulaban unos cuantos años de sol, viento y lluvia.

En lo que en su día había sido el salón, permanecían unos sillones que en su origen fueron rojos de eskay, una vieja alfombra raída y una mesita pequeña. Recuerdo haber ido explorando habitación por habitación, cuando estás en esa edad en la que no te dejan tocar nada, entrar en una casa en la que puedes llenarte de polvo, puedes tocar y desarreglar, es toda una invitación al paraíso.

Y fíjate, sin embargo, de lo que mejor me acuerdo de aquel día es de una habitación concreta. No era ni muy pequeña, ni muy grande, y los muebles eran de un color azulado, la mesa, la silla, la cama, una cómoda con cuatro o cinco cajones y el armario…

Fue en un cajón de la cómoda donde lo encontré, un cuaderno pequeñito, con las tapas duras de color verde. Sabía que era importante antes incluso de abrirlo.

Era un diario.

Me pregunté entonces por qué alguien escribiría su vida, sus sentimientos, sus penas y alegrías en un pequeño diario susceptible de ser descubierto y leído.

Hay quien escribe su vida en un pequeño diario de tapas verdes escondido en el fondo de un cajón, yo las escondo en este blog.
Igual da el sitio, en uno como en otro, quien las encuentra no puede resistir la tentación a leerlas.

1 comentario:

  1. Esos diarios pueden ser muy interesantes ademas d explicarte d pasada como era la vida en esa época. Por que no cuelgas algo del diario??? Lo consevas todabia???

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